El anarquismo fue eliminado de la historia de Azuqueca de Henares mediante la cárcel y el crimen de estado.
Luis Velasco se monto un marquesado con Felipe III y sus beneficiarios erigieron un señorío para la exigua aldea de Azuqueca de Henares en 1628. A los lugareños como Juan Lozano, el campo macilento y la aspereza de la ganadería de la villa, le dejaban una vida atribulada y la emigración de obligada salida con destino a la América Colonial de la Corona de los Habsburgo y a ejercer de criado del Obispo Antonio Sáenz en fechas de 1660. Lo único que hicieron los reyes por Azuqueca de Henares fue venderla para uso de noble y criar pobreza en sus habitantes.
Por eso en 1931 la población trabajadora puso fiesta para celebrar el destierro del Rey Alfonso XIII. Tras las colectividades anarcosindicalistas y la asociación común de los campesinos y labriegos para la gestión del campo arado y administrar “propaganda por los hechos”, el ejercito Franco-Fascista ocupa el municipio y empieza a dictar la justicia al revés de Serrano Suñer.
Felipe del Olmo Montesinos, Saturnino Cruz Yela y Eugenio Sánchez Cogollor se les pondrá tapia y pelotón de fusiles. El terror del yugo y las Flechas le colocara lapida y enterrador a Jesús Tortuero Silvestre, Saturnino Carlero Ruano y Leocadio Jiménez Retuerta. A Jesús Vera Saldaña se le dio patíbulo por un delito atribuido de amenazas y por su anticlericalismo y las autoridades ilegales Falangistas mandarían la detención de Pedro Tortuero Barreneche, Cecilio García Pliego, Ambrosio Romo Díaz, Tomas de la Cruz Yela y Alberto Henche Valles por participantes en el mantenimiento de la II República en el pueblo y por operar en contra del golpe de estado del 18 de Julio de 1936 y combatir a sus partidarios.
Los represaliados del régimen del Palacio del Pardo, también suman a Ramón Martínez Santamaría y Ricardo Paganos Domingo eliminados por el terrorismo de estado del gobierno del General Francisco Franco. La lista de torturados y puestos de reja está compuesta por Francisco Ruiz Paganos, Andrés Vázquez Gayoso, Cándido Vera Saldaña, Benito Romo de la Riva, Jacinto Asenjo Cuadrado, Eufemio Asenjo Cuadrado, Enrique Plaza Asenjo y Justino Plaza Ruiz. La infracción cometida fue el apresamiento de Pedro Vives Vich, General de División retirado y del capitán de artillería Higinio Madrazo Escalera a los que tramitaron a Madrid, por secundar e intentar derogar los derechos constitucionales y a la dirección del Frente Popular local. Haciendo uso del articulo XXIX de la Constitución de 1931, “que todo arrestado será dispuesto ante la jurisdicción correspondiente”, se suspendió de derechos jurídicos a los derechistas Casimiro Coubert Martínez, Sargento de la Guardia Civil retirado, Luis y Gerardo Lafon García, industriales y caciques de la localidad, Félix Pérez Cubillo, Pablo Orozco García, Leoncio Ruiz Pérez, Vicente Pacheco Palero, Manuel Basanta Llorente y Julián Pérez Pérez, todos ellos, empresarios, miembros de FE-JONS y del Partido de Acción popular, comprometidos con el alzamiento de la Junta de Defensa Nacional establecida en Burgos.
Las dos exclusivas victimas en Azuqueca de Henares, son Juan de Dios Garcés Garcés y Andrés Garcés Hernández, de afiliación derechista y asesinados de arma de fusil y escopeta el 24 de Julio de 1936 oriundos de Chiloeches e implicados en la asonada militar-Fascista. La UGT procedió a la expropiación de la Iglesia de la urbe a la que transformo en granero, según lo expuesto en el artículo de la Constitución XLIV que alega “La propiedad de toda clase de bienes podrá ser objeto de expropiación forzosa por causa de utilidad social” el 25 de Julio de ese año. En 1939 serian juzgados por esta acción Toribio Oñoro Díaz, José Torres Martínez, Anastasio Carlero López, Julián Carlero López, Ricardo Sanz Yela, Dionisio Tejero del pozo y Valentín Jiménez Retuerta. Todos delatados por el alcalde indebido Julián Calleja y su secretario Santos Alonso los dos de FET-JONS.
La colectividad de Miralcampo dirigida por la CNT, se convirtió en un ensayo de cometido anarco comunista en la gestión económica de la tierra, en contraposición a la Cooperativa de la “Acequilla” de naturaleza socialista y organizada por la UGT. La toma por tropas de ocupación Franquistas, supuso el fin de la experiencia libertaria y su extirpación de la historia. La represión desencadena y anteriormente mostrada, con apresamientos, crímenes de estado y tormentos hizo desaparecer a los administradores del reparto de la riqueza y la hacienda desde parámetros comunales y el allanamiento y destrucción de las organizaciones obreras, partidos, sindicatos y asociaciones antifascistas. La colectivización del término municipal, exceptuando los terrenos usados por el ministerio del aire del gobierno de la II Republica, que instalo un campo de aviación, activo durante la batalla del Jarama, dio pan, trabajo y erradico la pobreza extrema y aumento la justicia social. Hechos e ideas liquidadas por los delegados del fascismo internacional en España y transgresión jamás pasó por juicio.
Eduardo Andradas
Investigador histórico de la Guerra Civil Española en la comarca norte de Madrid y poeta.
Fuente de investigación: Archivos del Ministerio de Cultura y recomendado el estudio sobre la colectividad de Miralcampo de Azuqueca de Henares de la revista: Realidad en “Rojo y negro” “Por cuenta propia”.
Por eso en 1931 la población trabajadora puso fiesta para celebrar el destierro del Rey Alfonso XIII. Tras las colectividades anarcosindicalistas y la asociación común de los campesinos y labriegos para la gestión del campo arado y administrar “propaganda por los hechos”, el ejercito Franco-Fascista ocupa el municipio y empieza a dictar la justicia al revés de Serrano Suñer.
Felipe del Olmo Montesinos, Saturnino Cruz Yela y Eugenio Sánchez Cogollor se les pondrá tapia y pelotón de fusiles. El terror del yugo y las Flechas le colocara lapida y enterrador a Jesús Tortuero Silvestre, Saturnino Carlero Ruano y Leocadio Jiménez Retuerta. A Jesús Vera Saldaña se le dio patíbulo por un delito atribuido de amenazas y por su anticlericalismo y las autoridades ilegales Falangistas mandarían la detención de Pedro Tortuero Barreneche, Cecilio García Pliego, Ambrosio Romo Díaz, Tomas de la Cruz Yela y Alberto Henche Valles por participantes en el mantenimiento de la II República en el pueblo y por operar en contra del golpe de estado del 18 de Julio de 1936 y combatir a sus partidarios.
Los represaliados del régimen del Palacio del Pardo, también suman a Ramón Martínez Santamaría y Ricardo Paganos Domingo eliminados por el terrorismo de estado del gobierno del General Francisco Franco. La lista de torturados y puestos de reja está compuesta por Francisco Ruiz Paganos, Andrés Vázquez Gayoso, Cándido Vera Saldaña, Benito Romo de la Riva, Jacinto Asenjo Cuadrado, Eufemio Asenjo Cuadrado, Enrique Plaza Asenjo y Justino Plaza Ruiz. La infracción cometida fue el apresamiento de Pedro Vives Vich, General de División retirado y del capitán de artillería Higinio Madrazo Escalera a los que tramitaron a Madrid, por secundar e intentar derogar los derechos constitucionales y a la dirección del Frente Popular local. Haciendo uso del articulo XXIX de la Constitución de 1931, “que todo arrestado será dispuesto ante la jurisdicción correspondiente”, se suspendió de derechos jurídicos a los derechistas Casimiro Coubert Martínez, Sargento de la Guardia Civil retirado, Luis y Gerardo Lafon García, industriales y caciques de la localidad, Félix Pérez Cubillo, Pablo Orozco García, Leoncio Ruiz Pérez, Vicente Pacheco Palero, Manuel Basanta Llorente y Julián Pérez Pérez, todos ellos, empresarios, miembros de FE-JONS y del Partido de Acción popular, comprometidos con el alzamiento de la Junta de Defensa Nacional establecida en Burgos.
Las dos exclusivas victimas en Azuqueca de Henares, son Juan de Dios Garcés Garcés y Andrés Garcés Hernández, de afiliación derechista y asesinados de arma de fusil y escopeta el 24 de Julio de 1936 oriundos de Chiloeches e implicados en la asonada militar-Fascista. La UGT procedió a la expropiación de la Iglesia de la urbe a la que transformo en granero, según lo expuesto en el artículo de la Constitución XLIV que alega “La propiedad de toda clase de bienes podrá ser objeto de expropiación forzosa por causa de utilidad social” el 25 de Julio de ese año. En 1939 serian juzgados por esta acción Toribio Oñoro Díaz, José Torres Martínez, Anastasio Carlero López, Julián Carlero López, Ricardo Sanz Yela, Dionisio Tejero del pozo y Valentín Jiménez Retuerta. Todos delatados por el alcalde indebido Julián Calleja y su secretario Santos Alonso los dos de FET-JONS.
La colectividad de Miralcampo dirigida por la CNT, se convirtió en un ensayo de cometido anarco comunista en la gestión económica de la tierra, en contraposición a la Cooperativa de la “Acequilla” de naturaleza socialista y organizada por la UGT. La toma por tropas de ocupación Franquistas, supuso el fin de la experiencia libertaria y su extirpación de la historia. La represión desencadena y anteriormente mostrada, con apresamientos, crímenes de estado y tormentos hizo desaparecer a los administradores del reparto de la riqueza y la hacienda desde parámetros comunales y el allanamiento y destrucción de las organizaciones obreras, partidos, sindicatos y asociaciones antifascistas. La colectivización del término municipal, exceptuando los terrenos usados por el ministerio del aire del gobierno de la II Republica, que instalo un campo de aviación, activo durante la batalla del Jarama, dio pan, trabajo y erradico la pobreza extrema y aumento la justicia social. Hechos e ideas liquidadas por los delegados del fascismo internacional en España y transgresión jamás pasó por juicio.
Eduardo Andradas
Investigador histórico de la Guerra Civil Española en la comarca norte de Madrid y poeta.
Fuente de investigación: Archivos del Ministerio de Cultura y recomendado el estudio sobre la colectividad de Miralcampo de Azuqueca de Henares de la revista: Realidad en “Rojo y negro” “Por cuenta propia”.
1 comentario:
No dudo de que el autor de este texto se ha documentado pero, ¿se puede saber de dónde ha sacado que los detenidos Casimiro Coubert Martínez, Sargento de la Guardia Civil retirado, Luis y Gerardo Lafon García, industriales y caciques de la localidad, Félix Pérez Cubillo, Pablo Orozco García, Leoncio Ruiz Pérez, Vicente Pacheco Palero, Manuel Basanta Llorente y Julián Pérez Pérez, era todos ellos, empresarios y miembros de FE-JONS y del Partido de Acción popular? ¿Eso hace que merecieran ser sacados de su casa con nocturnidad y acabar en Paracuellos?
¿Tener una tienda es ser empresario? ¿Ser empresario es un delito? Y lo de caciques es de traca. Teniendo en cuenta que gente como los Lafón son descendientes de un inmigrante francés que llegó a ese pueblo en el s XIX.
Justificar los desmanes y sacas de las autoridades republicanas en Azuqueca acusando a los represaliados de ser "empresarios" "ex-sargentos de la Guardia Civil" o de tener simpatías derechistas es risible si no fuera porque estamos hablando de familias que El sr. Tortuero y otras autoridades destrozaron. Fue tal, el acoso que llevaron a cabo, que hubo menores de edad (hijos de los mencionados en el artículo) que dbieron dejar el pueblo y refugiarse en otras zonas.
Tan déspota y rastrero fue el comportamiento de las autoridades republicanas con su acoso a los católicos desde el principio de la guerra, que uno de los anarquistas que gestionaba la finca de Miralcampo, amenazó a los socialistas de poner una bomba en el comité si no dejaban de perseguir a ciudadanos que no estaban tomando parte en la guerra.
A ver si contamos todo.
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